El español Álvaro Bautista, que continúa con su fase de adaptación a la nueva Ducati Panigale V4 R, después de nueve temporadas consecutivas en la categoría de MotoGP, acabó en la cuarta posición, a poco más de cuatro décimas de segundo del registro del actual campeón del mundo de la categoría.

Prácticamente todos los equipos terminaron satisfechos sus programas de trabajo gracias a una climatología que,  aunque algo fría, sobre todo el primer día, permitió a todos los pilotos rodar sobre el nuevo asfalto completamente seco para conseguir las mejores puestas a punto de base y dar un aprobado alto a las condiciones de la nueva superficie de rodadura.

Todos los pilotos de Superbike, incluido el británico Chaz Davies, que salió a pista casi al final de la sesión, resentido en su espalda de la caída del primer día, mejoraron sus registros con respecto a la anterior jornada, merced en gran medida al sol, la subida de temperatura y la huella de goma existente en la calzada, que aumento el 'grip' de la pista y con ello el rendimiento de las motos.

Una vez más, el británico Jonathan Rea se convirtió en la referencia, al conseguir un registro de 1:39.160, apenas ocho milésimas de segundo más lento que el alemán Stefan Bradl, quien también rodó en Jerez pero sobre el prototipo Honda de MotoGP y a escasas dos décimas del tiempo de la Superpole de la carrera jerezana de 2017 en la que el italiano Marco Melandri establecía la “pole position” en 1:38.960.

Aunque hay que recordar que el pasado mes de noviembre Jonathan Rea ya consiguió rodar en el trazado jerezano con un registro de 1:38.713.

Entre los aspirantes a desbancar en la temporada 2019 a Jonathan Rea, destacaron sus compatriotas Alex Lowes (Yamaha YZF R 1) y Leon Haslam (Kawasaki ZX 10 RR) -su nuevo compañero de equipo tras la marcha de Tom Sykes-, y el español Álvaro Bautista, que se esfuerza al máximo por adaptarse a la nueva categoría tras su paso por MotoGP.